La Unión Deportiva Socuéllamos firmó este domingo un empate heroico (1–1) en su visita a la Ciudad Deportiva del Real Madrid, en un duelo donde los de Jacinto Trillo demostraron de nuevo carácter, sacrificio y una fe inquebrantable hasta el último instante.
El filial blanco arrancó dominando el choque, acumulando posesión y mandando con claridad en campo rival, pero el Socuéllamos supo sostenerse con orden y disciplina durante toda la primera parte, evitando que la superioridad local se tradujera en ocasiones claras de gol.
Tras el descanso, el empuje madridista fue aún mayor. Las oportunidades se sucedieron, pero apareció un Bernabé excepcional, que firmó varias intervenciones de muchísimo mérito para mantener con vida al equipo azulón.
La resistencia, sin embargo, se quebró en el minuto 80, cuando Jacobo culminó una acción ofensiva para adelantar al filial (1–0). A pesar del golpe, el Socuéllamos no se rindió. Trillo ordenó un paso adelante y el equipo se volcó con determinación en busca del empate.
La recompensa llegó cuando el partido agonizaba. En el minuto 94, un balón colgado al área y una acción de insistencia de Juanma Porro desembocaron en un autogol de un defensor madridista, desatando la euforia del conjunto socuellamino y sellando un empate tan sufrido como meritorio.
El punto logrado en un escenario tan exigente como Valdebebas debe considerarse muy valioso, especialmente para un Socuéllamos que continúa colista pero que sigue demostrando que compite, cree y no se rinde.
El equipo volverá al Estadio Paquito Giménez el próximo domingo a las 12:00 horas, donde recibirá al UB Conquense en un duelo clave para seguir sumando y alimentando la esperanza.
